Azulia, mejor conocida como ‘Azul’, es una inocente y tierna sirena que tras cumplir 17 años decide emerger de las aguas del océano para poder conocer el mundo terrestre. Esto sin saber que su vida dará un giro de 360º luego de conocer al pirata Harry, hijo de Barba Negra, quien engañado por la joven emprende un viaje junto con ella a pesar de todos los riesgos en los que podría meterse.
El proceso de adaptación de Azul junto a su nuevo compañero no es rápido, ya que tiene que aprender a caminar sobre sus dos piernas firmes por primera vez luego de salir del mar y sobretodo al no comprender correctamente todos los “términos terrenales” empleados por su joven acompañante, un pirata ladrón buscado en varios países al ser acusado de cometer hurtos.
Problemas mayores inician cuando las hermanas y el padre de la joven sirena, el rey Poseidón, deciden buscarla por todos los rincones del inmenso mar hasta dar con su paradero: El gran barco comandado por Harry, quien navega no solo para hallar el tesoro dejado por su padre, sino también a ese hombre que lleva su sangre y lo abandonó cuando era pequeño, causándole algunos traumas internos.
“¿Cuántos nobles de cuna de oro podrían darse el lujo de decir que duermen bajo millones de estrellas?”
Cánticos nocturnos, brújulas ancestrales e incluso peleas con esqueletos humanos son solo un pequeño ejemplo de lo que encontraremos en `La historia de Azul´, una novela que reúne el misticismo del mar junto a las aventuras de pequeños jóvenes que deciden arriesgar su vida con tal de encontrar respuestas y demostrar todo lo que son capaces de hacer por cumplir cada uno de sus objetivos, muchas veces sin medir las consecuencias.
Es también un cambio del concepto de ‘sirenita’ al que estamos acostumbrados, con una jóven Azul que a pesar de no comprender mucho el lenguaje terrenal, es una guerrera que hace de todo por luchar y salir adelante siempre, no solo contra todas las pruebas que el universo pondrá en su camino, sino también siendo ella quien se encargará de salvar la vida de algunos, y de salvarse ella misma de la culpa de una promesa que sabe que nunca podrá cumplir.
“Mi único deseo sería poder retroceder el tiempo y quizá no haber subido a la superficie en mi cumpleaños.” - Azul.
Comments